La gente quiere comunicarse por Internet con la misma facilidad que en la vida real, con protecciones similares pero, potencialmente, con mayor alcance. En otras palabras, la gente quiere poder chatear con un grupo de personas que no se encuentran físicamente en el mismo lugar, y seguir manteniendo cierto control sobre quién reclama la propiedad de la conversación. En el mundo actual, por supuesto, muchas empresas tienen mucho que decir sobre quién es el propietario de los datos que envías de un lado a otro de la red mundial. La mayoría de las empresas parecen sentir que tienen derecho a…